Motricidad

Motricidad

martes, 3 de junio de 2014

Décima Sesión: As de los sentimientos

AS DE LOS SENTIMIENTOS
Recursos:
Ø  Gafas mágicas.
Ø  Un pañuelo.

Planteamiento:
1. Calentamiento: Al ser la última sesión de este plan de mejora, intentaremos realizar actividades que recojan lo más importante para trabajar la inteligencia emocional a través de la motricidad. Comenzaremos, como en todas las sesiones, calentando el cuerpo en su totalidad y cantando la canción “Buenos días para todos”. Cada niño deberá decir cómo se siente y porqué se siente así de manera que todos los niños intervengan.
Después, jugaremos a las gafas mágicas. Para ello contaremos con unas grandes y les diremos a los niños que cuando se las pongan solo verán las cosas buenas de sus compañeros. El niño que se las ponga, deberá de decir algo bueno de sus compañeros.

2. Desarrollo: Cuando acabemos con las gafas la profesora preguntará:
- ¿Quién quiere a su mama?, ¿quién quiere a su papa?, ¿quién quiere a sus amigos?, y ¿quién se quiere a sí mismo?
            Explicaremos a los niños que a todo el mundo que queremos les damos abrazos y besos como ya hemos hecho otros días en clase pero a nosotros no solemos dárnoslos así que vamos a dedicar tiempo a ello. Abriremos el círculo todo lo que podamos para tener espacio suficiente para realizar movimientos. A la voz de “un, dos, tres” los niños darán tres palmadas en las piernas. La segunda vez que oigan “un, dos, tres” se darán tres autoabrazos y la tercera vez que lo oigan deberán darse tres besos.
            Realizaremos esta actividad dos o tres veces dependiendo de lo motivados que estén antes de cambiar a la siguiente.
            Dividiremos la clase en dos grupos para jugar al juego del pañuelo, pero en vez de ser cada uno un número será una cualidad. La profesora irá a los dos grupos para decirle a cada niño una cualidad positiva que tenga (esa cualidad estará compartida por la mayoría de la clase y serán las mismas en los dos grupos). A continuación será como el juego tradicional en la que la profesora se colocará en medio de los dos grupos con un pañuelo y dirá una cualidad. El niño que posea esa cualidad deberá ir corriendo a por el pañuelo, cogerlo y volver hasta su sitio sin que el compañero del otro equipo le pille.

3. Vuelta a la calma: Para finalizar nuestras diez sesiones, sentaremos a los niños en círculo y hablaremos sobre qué es lo que más les ha gustado de nuestras sesiones, qué cosas buenas han dicho sus compañeros de ellos y cómo se sienten cuando oyen decir esas cosas buenas. Por último, en parejas, uno se tumbará y el otro le dará un masaje diciéndole cosas buenas sobre él y porqué le gusta ser su amigo. Cuando la profesora lo estime oportuno cambiarán los roles.

Evaluación:

            En la última parte de nuestra ficha-registro realizaremos una valoración global sobre la autoestima que tiene cada uno de nuestros alumnos y si han aprendido a valorar más las cualidades de los compañeros no sintiéndose más o menos importantes que ellos.

Novena Sesión: Mis sentimientos

MIS SENTIMIENTOS

Recursos:

  • Imágenes de personas con distintas expresiones.
  • Balones o pelotas rojas y verdes.
  • Ordenador o aparato eléctrico con música.

Planteamiento:

1. Calentamiento: Una vez finalizado el calentamiento global del cuerpo y haber cantado la canción “Buenos días para todos” hablaremos de nuevo sobre cómo se sienten. Al quedar solo dos sesiones de trabajo, todos los niños deberán haber mejorado en su expresión y conocimiento de las emociones. Para ello, colocaremos unas imágenes alrededor de la clase de gente con distintos estados de ánimo. Uno por uno irán corriendo a por una de las fotos y la colocarán en medio del círculo. Los demás compañeros deberán decir porqué creen que se siente así y tras escucharles dirá la verdadera razón.
Al final, realizaremos un juego llamado “Esto es un abrazo”. Comenzará la profesora diciéndole al niño de su derecha “esto es un abrazo” y le dará un abrazo. El niño le contestará “¿un qué?” y la profesora volverá a contestar “un abrazo” y le volverá a dar otro. Ese niño deberá realizar lo mismo con su compañero de la derecha, y así irán uno por uno hasta acabar el círculo.

2. Desarrollo: Esparciremos por la clase todas las pelotas que tengamos de color verde y de color rojo. Los niños irán andando por el espacio mientras suena una música y cuando se pare la profesora propondrá una situación (Por ejemplo: ¿quién se enfada cuando mamá no quiere ir al parque?) Los niños que lo hagan deberán coger la pelota roja, los que no lo hagan deberán coger la verde. Cuando todos tengamos una pelota de un color hablaremos sobre porqué reaccionamos así ante esas situaciones.
A continuación, realizaremos otra actividad que les permita concienciarse a los niños sobre todo lo que saben hacer bien. Uno a uno según ordene la profesora irán diciendo algo que sabe hacer bien y los demás deberán imitarle. Si algún niño repite la misma acción que otro no valdrá y deberá pensar otra cosa que sepa hacer bien. De este modo evitaremos que todos los niños hagan lo mismo que el líder de la clase.

3. Vuelta a la calma: Los niños deberán tumbarse en el suelo de la forma que más cómoda y relajante les sea. Sonará una pieza de música clásica que han de escuchar con detenimiento ya que al finalizar cada uno dirá a que le ha recordado o que se ha imaginado.

Evaluación:
            En el penúltimo apartado de nuestra ficha-registro deberemos apuntar si son capaces o no de reconocer las emociones de los demás y las propias, cómo reaccionan ante diferentes situaciones y si son capaces de relajarse correctamente.

lunes, 2 de junio de 2014

Octava Sesión: ¿Jugamos?

¿JUGAMOS?
Recursos:
  • Bolos y pelota.
  • Aros y picas.
  • Pelotas.
  • Bloques de goma espuma (o similares)
Desarrollo:
            1. Calentamiento: Tras comenzar con nuestros ejercicios de calentamiento y haber cantado la canción de “Buenos días para todos” pasaremos a la siguiente actividad. Aprovechando que tenemos a los niños sentados en corro, comenzaremos con el niño de nuestra izquierda. Deberá de preguntarle al compañero de su izquierda “¿Me quieres?” y el compañero contestará “Sí, pero ahora no puedo reírme” por lo que deberá intentar hacerle reír bien mediante cosquillas o bien haciendo mínima. Así irán uno por uno hasta completar el círculo.

            2. Desarrollo: Dividiremos la clase en cuatro rincones en los que en cada uno de ellos se realizará un juego diferente:
- En el primero se jugará a los bolos. Por cada bolo tirado el niño deberá decir una cualidad positiva suya.
- El segundo juego consistirá en meter aros de colores en unas picas puestas verticalmente. Por cada aro metido el niño deberá decir una cualidad positiva de cada uno de sus compañeros.
- En el tercero jugarán a la “petanca”. La profesora colocará un aro en el suelo y cada niño deberá tirar una pelota para intentar meterlo dentro del aro o dejarlo lo más cerca posible a él. El niño que gane deberá decir una cualidad positiva suya y una de cada uno de sus compañeros.
- En el cuarto rincón jugaremos al fútbol. Realizaremos una portería con bloques de goma espuma o algún material que nos permita hacerla no muy grande. Cuando todo el equipo meta gol, harán un compromiso para mejorar la convivencia en el aula.

            3. Vuelta a la calma: En la vuelta a la calma, hablaremos sobre qué juego les ha gustado más, qué cosas buenas hemos dicho los unos de los otros y cómo nos hemos comprometido a mejorar la convivencia del aula.
            Tras estos minutos de reflexión, explicaremos a los niños lo importante de respirar bien a la hora de relajarnos (inspirar por la nariz y expirar por la boca) y realizaremos un juego. Los niños se tumbarán en el suelo y cerraran los ojos. Les diremos que tienen que respirar de la manera que les hemos dicho y que no podrán moverse pase lo que pase, aunque oigan ruidos fuertes o su nombre. El niño que consiga aguantar toda la actividad respirando correctamente obtendrá un caramelo.

Evaluación:

            En esta sesión observaremos si los niños son capaces de respirar correctamente a la hora de relajarse y si han sabido valorar las cualidades buenas de ellos mismos y de sus compañeros.